¿Sabías que comemos plástico todos los días por culpa de un alimento básico? Te contamos cuál es

En 'Mañanas de Oro', con Freddy Morales de 9 a.m. a 12 p.m, queremos seguir alimentando tu apetito de conocimiento por eso te contamos que, aunque no lo sabías, al ingerir la sal, estás ingresando un componente tóxico al cuerpo que, a futuro, puede tener terribles consecuencias.

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La sal contiene plástico

Un estudio publicado en la revista Environmental Science & Technology observó que el 90 % de las marcas de sales de mesa utilizadas para la investigación (marcas de todo el mundo) contienen muestras de microplásticos. El análisis fue realizado por el Departamento de Ciencia Marina de la Universidad Nacional de Incheon, en Corea del Sur, junto con Greenpeace East Asia.

Los microplásticos son «pequeñas piezas de plástico, menores de cinco milímetros, que, o bien se fabricaron ya con ese tamaño para ser empleadas, por lo general, en productos de limpieza e higiene, o bien se han fragmentado de un plástico mayor en su proceso de deterioro», explica la Fundéu.

La contaminación de las sales marinas como consecuencia de la contaminación de las aguas es un hecho, pero la gran preocupación está situada justamente en que el mismo tipo de componentes tóxicos se está haciendo presente en la sal de mesa que ingerimos a diestra y siniestra sin siquiera cuestionar su composición.

Entre las 39 marcas de sales de mesa analizadas para el estudio, se encontró que las más contaminadas por microplásticos son las que provienen de regiones asiáticas, precisamente las que registran un grado de contaminación plástica realmente alto.

A partir de los resultados de los análisis, se pudo estimar que un adulto consume una cantidad de 2 mil microplásticos al año, en promedio, como consecuencia del consumo de sal. En cuanto a los efectos de este consumo en nuestra salud, todavía se desconoce su grado exacto de peligro, pero contener altas cantidades de plástico en el cuerpo no puede indicar algo bueno.

Si bien los microplásticos son expulsados de manera natural por el cuerpo humano, el gran problema de salud podría radicar en otros componentes tóxicos que se hacen presentes en los plásticos y que terminarían afectándonos. Es decir, es una cadena tóxica.